Olor a Dinero
Por: Feliciano J. Espriella
Jueves 22 de agosto de 2024
Extraña obsesión del “gober” por el turismo
En Sonora tenemos mucho de qué vanagloriarnos. Mucho de que presumir. Mucho por lo que se nos reconozca. Nuestros ancestros vencieron el desierto y convirtieron en vergel la Costa de Hermosillo y la región de Caborca; durante décadas se nos consideró el granero de México y todavía proveemos al resto del país el trigo para producir el pan que se sirve en la mesa de gran parte de compatriotas; la calidad y sabor de nuestra carne de bobino es nacional e internacionalmente reconocida y, podría seguir el resto de esta entrega, enumerando logros que nos enaltecen.
Pero definitivamente Sonora no es una potencia turística, como nos lo han querido vender desde que se inició la actual administración estatal por razones que realmente no alcanzo a comprender.
Nuestra realidad es que somos una entidad con cualquier cantidad de recursos naturales para atraer visitantes de todos los gustos y de todo el planeta, pero a los que ningún gobernante, desde el primero que designó el virrey en turno durante la colonia hasta el actual, han tenido la visión de desarrollar.
Tenemos playas mucho más amigables y bellas que gran cantidad de los destinos turísticos internacionales de México, pero a las que nunca se les ha dado ni siquiera una mediana atención para atraer visitantes fuera de los pocos que vienen por vía terrestre. Las dos más conocidas, San Carlos y Puerto Peñasco tienen acceso aéreo a través de aeropuertos que no llegan ni a regulares. En nuestro litoral los amantes del buceo y los deportes acuáticos encuentran excelentes opciones, y una extensa variedad de fauna marina para los pescadores.
Para los amantes de la naturaleza, contamos con zonas desérticas que nunca se han explotado, poblaciones ubicadas en nuestras sierras media y alta, pintorescas, hermosas y enmarcadas por bellísimos paisajes a las que es casi una odisea llegar por las infames vías de acceso; la diversidad de nuestra flora y nuestra fauna entre las que destacan variedades de aves incomparables y especies únicas como el cimarrón, no son debidamente aprovechadas.
Desde que yo recuerdo, al iniciar su mandato todos los gobernadores que ha tenido Sonora en los últimos 50 años se han comprometido a impulsar fuertemente la actividad turística y aprovechar nuestras ventajas competitivas en el sector. Ninguno, que yo sepa, ha cumplido. Siempre han sido más las echadas que las ponedoras.
Pero quien de plano realmente no se midió, fue Alfonso Durazo, quién, sin dudarlo un instante, puedo asegurar que ha emitido la balandronada más grande de todos los gobernantes en la historia del estado. No me cansaré de repetirlo: en el evento con el que se festejó la reinauguración del Hotel San Carlos Plaza, ofreció, ante decenas de hoteleros, restauranteros y diversos prestadores de servicios turísticos, incrementar durante su mandato la participación del turismo en el PIB, y elevarlo del 7 por ciento, al 20.
Además, lo siguió repitiendo en varias ocasiones en los siguientes años y no hubo un alma caritativa entre sus achichincles que le hiciera comprender que era más fácil mandar un sonorense a la luna que realizar su enfermiza fijación. Creo que ya se convenció a la luz de los misérrimos resultados que durante su gestión se han alcanzado en la actividad.
Sin embargo, se insiste en darnos atole con el dedo a los sonorenses o hacernos comulgar con ruedas de molino, y periódicamente un diario hermosillense publica en primera plana notas en las que pintan al sector turístico y a la actividad, como si estuvieran en una bonanza que está muy lejos de la realidad.
Dichas notas, sustentadas en supuesta información publicada por Inegi y por lo tanto de muy difícil o imposible confirmación, se refieren a excelentes y espléndidos resultados en turismo.
Relacionaré a continuación los títulos de las más recientes, publicadas en los últimos 45 días, todas ellas enmarcadas como nota principal del día y obviamente en primera plana (portada):
21 de agosto: “HOTELES Y RESTAURANTES CRECEN EN VERANO 24.2%. Con este resultado, afirman en el texto, Sonora se posiciona como el sexto estado con mayor crecimiento a nivel nacional.
24 de julio: “INGRESOS POR HOSPEDAJE SE DISPARAN UN 160%” (se refiere a Sonora, naturalmente).
23 de julio: “SE FORTALECE EL SECTOR HOTELERO EN MATERIA LABORAL”. Según el texto, Sonora está en séptimo lugar nacional con mayor crecimiento en esto.
15 de julio: “LOGRA HERMOSILLO EL 5TO LUGAR NACIONAL EN OCUPACIÓN HOTELERA”.
Bueno, pues no me queda más que felicitar a los amigos hoteleros que por lo que se publica están viviendo un período de vacas súper gordas, ¿o será sólo que por ahí circula un diario que explota la enigmática obsesión por el turismo de nuestro titular del ejecutivo?
¿O será que el gobernador quiere borrar el monumental desbarre de ubicar la región de El Pinacate en el vecino estado de Baja California cuando vino a conocer Sonora como candidato a la gubernatura?
Por hoy fue todo. Gracias por su tolerancia y hasta la próxima.
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