Archivo Confidencial
Por Armando Vásquez A.
Jueves 15 de agosto de 2024
Bastón de mando, hasta octubre
EN LAS INSTALACIONES del Tribunal Electoral entregarán la constancia como presidenta electa a Claudia Sheinbaum. Ese será el verdadero bastón de mando. De allí pasará al Teatro Metropolitan donde dará un breve discurso sobre el segundo piso de la 4T y ante los integrantes de su próximo gabinete, legisladores morenistas y demás invitados especiales.
No estará presente López Obrador. Al menos es lo que dio a entender cuando dijo a principios de junio que esperará ejercer la comunicación con Claudia cuando su gobierno inicie el período de transición. Ya hemos visto que la ha invitado a sus nueve giras de despedida por el país, así que es una mentira más de las cien diarias que ha dicho durante sus mañaneras que suman más de 105 mil durante su sexenio.
La lógica indica que el rostro de Sheinbaum no va a cambiar en los 46 días que le faltan a YSQ para que se vaya a YSD. Y entonces sí, Claudia empezará a ser realmente la primera presidenta de México. Con el peso del país encima vamos a empezar a conocerla.
Llama la atención que, en su gabinete actual integrado por 26 titulares, once son damas. Rosaura Ruiz – Secretaria de Ciencia, Ernestina Godoy – Consejera jurídica de la Presidencia, Alicia Bárcena – Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Luz Elena González – Secretaría de Energía, Raquel Buenrostro – Secretaría de la Función Pública, Edna Elena Vega – Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.
Asimismo, Ariadna Montiel Reyes – Secretaría del Bienestar, Rosa Icela Rodríguez – Secretaría de Gobernación, Claudia Curiel de Icaza – Secretaría de Cultura, Josefina Rodríguez Zamora – Secretaría de Turismo, Leticia Ramírez Amaya – Coordinación general de asuntos intergubernamentales y participación social y Emilia Esther Calleja Alor – Comisión Federal de Electricidad, en este último caso quedará fuera Manuel Bartlett, el gran hacedor de riquezas raras.
De hecho, Sheinbaum quiso poner al frente de la SEDENA a una mujer, pero no hay damas que sean generales, detalle que por cierto va a cambiar durante su sexenio. Aún determina quien estará al frente de la Defensa Nacional lo cual será un tema que resolverá en septiembre, me imagino que está a la espera de que baje de intensidad sobre este asunto del Mayo Zambada. Eso sí, suenan dos generales, al menos de momento.
Ya la presidenta electa dijo que no sabe si vivirá en Palacio Nacional como Amlo. También señaló que seguirá con las mañaneras a las siete y a las seis serán las reuniones con el gabinete de seguridad, el mismo formato de López Obrador a quien por cierto no ha dejado de adular.
Quiero imaginar que esa acción de lame suelas quedará de lado en cuanto se ponga la banda presidencial por simple lógica: su padrino estará fuera de los reflectores –mínimo un año–, por un lado y por el otro, deberá establecer su estilo de liderazgo que se verá pronto.
Otro detalle que vale la pena resaltar: los nombramientos se han hecho sobre personas capaces académicamente en su mayoría lo cual refleja que el doctorado si sirve de algo, no nada más para quitar lo tarado.
Aunado a ello hay personajes que saben cuidar muy bien las formas y que sabrán mantener su protagonismo, es decir, ya no se presentará aquel control centralista de los reflectores mantenido por Amlo vía mañaneras por más que Claudia Sheinbaum las tomó de ejemplo justificando que sirven para dictar agenda. Ya no será así. ¿O usted cree que personajes como Marcelo Ebrard bajará la cabeza y se quedará callado ante los reflectores de los medios de comunicación?… creo que no.
Otra preocupación menos para los mexicanos será que su única hija– Mariana Ímaz Sheinbaum– no aparecerá en escándalos de corrupción como ocurrió con los tres vástagos de López Obrador cuya historia de maldades seguirá actualizándose.
A su vez la relación con la prensa en general tenderá a mejorar si tomamos como referencia que en su campaña hizo la invitación a los contreras a que se le unieran vía las áreas de comunicación de los estados morenistas anteponiendo la condición de que no importaba que le atacasen, pero que también cubrieran su información. Tendió un puente que de seguro le dará una luna de miel por lo menos de un año.
Pero la prensa es el menor de sus problemas. Lo más fuerte que enfrentará será su relación con el mundo, principalmente Estados Unidos y China pues en esa guerra que se traen, ella estará en medio.
Quien gane la presidencia en EU va a querer imponer su bota en el pescuezo del nuevo gobierno mexicano por distintos factores ya conocidos, pues quieren control total. Ya veremos que decisiones tomará.
Soy un convencido de que se alejará poco a poco del estilo muy propio de López Obrador quien se enceró toda su vida en México y nunca ha participado, como lo hizo la presidenta electa, en manifestaciones políticas cuando fue alumna de la Universidad de Stanford (1991) protestando contra la dictadura de Salinas y la firma del TLC, pero en terreno gringo.
Cómo sea, a partir de hoy y para enfrente –luego del primero de octubre-, se vislumbrará el México en el que posiblemente viviremos los próximos seis años.
EN FIN, por hoy es todo, mañana le seguimos si Dios quiere.
Armando Vásquez Alegría es periodista con más de 35 años de experiencia en medios escritos y de internet, cuenta licenciatura en Administración de Empresas, Maestría en Competitividad Organizacional y Doctorando en Administración Pública. Es director de Editorial J. Castillo, S.A. de C.V. y de “CEO”, Consultoría Especializada en Organizaciones…
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