El Juglar de la Red
Por Rafael Cano Franco
Viernes 9 de agosto de 2024
Censura sin rubor
En una conferencia de prensa donde el alcalde de San Luis Río Colorado, Santos González Yescas, estaba respondiendo cuestionamientos de los medios de comunicación locales, el reportero Manuel Ángulo, de la empresa “Megacable”, le preguntó sobre un gasto por dos millones de pesos cargados a la dirección de comunicación social.
La pregunta sacó de quicio al presidente González Yescas quien acusó al reportero de hacer preguntas que le ordenan terceras personas y aunque trató de no elevar la voz y mantener cierta cordura, fue evidente que el cuestionamiento había dado en el blanco.
Ante la insistencia del reportero para que su pregunta tuviera una respuesta, la reacción de González Yescas fue más patética y ordenó que el micrófono le fuera retirado al periodista.
Esto, por sí mismo ya es un claro atentado a la libertad de expresión, pero luego asistentes del alcalde intentaron impedir por la fuerza que el reportero siguiera con sus cuestionamientos al grado de que se le interpusieron en el camino para bloquear el acceso al alcalde y seguir con la insistencia de una respuesta.
El señor González Yescas, que de un tiempo a la fecha está convertido en un auténtico “chivo en cristalería”, no solamente exhibe la enorme frustración que carga a cuestas luego de su derrota electoral, también se lanza en contra de reporteros locales que solamente intentan documentar una situación y le preguntan en las ruedas de prensa a las que él mismo convoca.
Si no quieren que le pregunte nada, entonces ¿para qué demonios cita a reporteros? Puede que quiera que todo sea paz y tranquilidad.
Mandar que el micrófono le sea retirado a un colega es una forma de censura, como también lo es cuando alguien quiere preguntar y se lo niegan de manera sistemática; que se organicen listados y registros bajo el argumento de “ordenar” conferencias de prensa, también son un atentado a la libertad de expresión.
Y es que no se trata solamente de decir que hay respeto y respaldo al trabajo informativo y a quienes lo realizan, el asunto pasa también por las formas y las facilidades que se ofrecen para realizar una cobertura periodística que incluye las preguntas “incómodas” pero que merecen respuestas, sobre todo cuando hay dinero público involucrado.
Se ha puesto de moda citar a conferencias de prensa para que los funcionarios hablen de lo que a ellos les interesa, pero cuando aparecen las preguntas incómodas entonces se niegan a responder o en el peor de los casos, acusan al reportero de servir a intereses perversos y a partir de eso lo censuran, lo retiran o lo bloquean.
Cuando las cosas no les salen bien a los políticos, es fácil acusar a los reporteros de exagerar la nota o de magnificar los hechos; así lo han hecho en el tema de la inseguridad pública los presidentes municipales de Caborca, Cajeme y ahora se suma el de San Luis Río Colorado, pero todo esto deriva de la inexistencia de una política de comunicación social poco clara, donde lo que menos importa es informar y responder, pues la intención es hacer propaganda gubernamental.
La improvisación en las áreas de comunicación social o en las vocerías de prensa terminan por pasar facturas muy altas a quienes deciden colocar ahí a personas desconocedoras del medio e ignorantes de lo que es la comunicación y la relación con la prensa, estos funcionarios demuestran su ineptitud ante situaciones de crisis, ahí muestran que son presa fácil del pánico y tienden a censurar o acallar voces con base en “billetazos”, ignorando que la comunicación social se lleva mejor y da mejores resultados cuando se hace política y se generan relaciones públicas positivas a largo plazo.
Y un último detalle, todo lo referente a las decisiones en temas relacionados a prensa y su trato, jamás se achacan a los encargados del área, al final de cuentas la responsabilidad siempre recae en el gobernante y es su imagen la que termina afectada, positiva o negativamente.
Se le metió “El Chamuco”
El cónsul de México adscrito al Consulado en Shangai, Leopoldo Guadalupe Michel Díaz, dio una muestra de lo que no debe ser y en un arranque de locura arremetió contra el personal consular, contra el Cónsul General, Miguel Ángel Isidro Rodríguez, un escándalo que debe costarle el cargo a este energúmeno sujeto.
Quién sabe por qué razón, Leopoldo Díaz Michel, en una auténtica facha de pordiosero y denigrando la representación consular que ostenta, primero se lanzó contra un empleado, quien no atendió sus órdenes por tener otras directamente dictadas por su jefe. Esto enfureció a Díaz Michel y lo lleno de improperios.
Cuando intervino el Cónsul General, Miguel Ángel Isidro, la furia contra el empleado la trasladó al diplomático y lo acusó de ser parte de una red que vendía alcohol en Kuwait, un delito muy penado en ese país.
Miguel Ángel Isidro, con un poco más de calma invitó a retirarse a Díaz Michel pero lo que recibió fue un recordatorio materno y de ahí derivó que el Titular del Consulado lo llamara “bazofia” y “rémora”.
Todo el espectáculo fue grabado por el propio personal consular y obviamente se hizo público por instrucciones de las más altas autoridades para exhibir el talante y la pésima imagen que genera Díaz Michel como Cónsul Adscrito.
Michel Díaz no es un improvisado y tiene una amplia carrera en el servicio exterior de México, sin embargo, la actitud que mostró y que generó diversas opiniones, dejó en claro que no estaba en su mejor momento.
Esta escena me recordó al altercado que tuvo la periodista Isabel Arvide cuando siendo embajadora de México en Turquía se enfrascó en un nada constructivo diálogo con una empleada a quien le mostró todo el florido léxico que conocía.
Esto que sucede es la falta de orden y control en los consulados y embajadas de México, donde los nombramientos son premios políticos o concesiones graciosas a cambio de favores.
Tips cortitos pa´no enfadar:
1.- Cada vez que un atleta mexicano que forma parte de los deportes acuáticos (natación, nado sincronizado o artístico y clavados) gana una medalla, es un recordatorio de que ese triunfo es mérito exclusivo del deportista y no de los burócratas de la Conade.
Desde el 2023, la Conade les quitó las becas a todos quienes participan en deportes acuáticos y aunque perdió los amparos correspondientes, lo que llamó la atención es la constante confrontación de Ana Gabriela Guevara en contra de estos deportistas cuya intención solamente era obtener los apoyos para seguir compitiendo sin tener que hacer otras actividades para financiarse.
Por eso, ahora que ganan medallas en las Olimpiadas de París, cada posteo que hace la Conade felicitándolos y tratando de asumir que formó parte del proceso, no solamente es un nuevo insulto y agravio al deportista, también es la manifestación plena de la carencia de vergüenza y pudor, tanto de Ana Gabriela Guevara como de la Conade, que ahora sin mayores méritos quiere adjudicarse un logro que no le corresponde.
Lo peor es que otros atletas, como el equipo de tiro con arco, que también ganó una medalla de bronce, ya expusieron que los apoyos recibidos de Conade fueron paupérrimos.
Son los últimos clavos al ataúd de Ana Gabriela Guevara, quien brilló como deportista, pero es un fracaso en su calidad de funcionaria.
2.- El cierre de la empresa “Black&Decker” en Hermosillo que recién inicio operaciones el 2022, es un duro golpe para 600 trabajadores y sin embargo, el dirigente de la CTM en la Capital, Óscar Ortiz Arvayo, salió a minimizar el tema.
Más allá de que la empresa está cumpliendo con las liquidaciones correspondientes a lo que marca la ley y maneja con pulcritud el tema de su cierre, para las familias afectadas la postura del líder sindical cetemista y futuro diputado local, es la muestra del “valemadrismo” y es que al final de cuentas él no es quien va a batallar, ni tampoco será el soporte económico de las personas desempleadas, su papel parece ser la de un esquirol que el de un auténtico líder sindical preocupado por el bienestar de los trabajadores.
Otros Juglares:
–““Vemos a mexicanos (en el futuro gabinete de Claudia Sheinbaum) de apellido Kershenobich, Ebrard, Berdegué, Harfurch, que deben ser buenos servidores públicos, pero también nos gustaría leer nombramientos con apellidos Chan, Zitle, Xopa, Pech, Acatl, Xiquitl. Hay profesionistas indígenas con maestría, doctorado, especialidad. ¿O acaso solo serviremos para poner collares de flores, dar bastones de mando y quemar incienso cada seis años?”.
Parte del pronunciamiento por dirigentes del pueblo Otomí que forman parte del Consejo Supremo Hñähñu (CSH), que agrupa a dos millones de indígenas quienes lamentaron que en la conformación del nuevo gabinete de Claudia Sheinbaum no existen funcionarios que representen a las etnias de México. Gracias por su atención, hasta el lunes si Dios quiere. ¡Salud!