Archivo Confidencial
Por Armando Vásquez A.
Jueves 8 de febrero de 2024
Un presidente cobarde
DÍAS ANTES DE FALLECER Porfirio Muñoz Ledo le dijo a Adela Micha que fue el primero en decirle a López Obrador que México era un narco estado y le subrayó que el presidente lo sabía.
Abundó: dijo que su intención con sus declaraciones era limpiar a México del fardo del narcotráfico. “Nos va a costar históricamente lo que no tienes idea limpiar a la clase política y volver en lo posible a una asunción democrática” y se preguntó qué será del país a lo cual contestó sin titubear que íbamos a ser similar a Venezuela.
Dejó en claro que la gente le va a empezar a perder el miedo, “que es lo que tú no quieres, pero las cosas van a ocurrir, mejor que ocurran democráticamente para el país, no trates de perpetuarte Andrés.
“Te digo una cosa muy fuerte, Andrés no mata, no es violento, siempre decía en los mítines, no hemos roto ni un vidrio, a veces hasta se veía cobardón, hasta inhibirse en el uso de la violencia. Yo no conozco de nadie que me pueda decir, viéndome a los ojos, que Andrés Manuel mandó matar a alguien.
“Creo que el país necesita serenarse, pero no debe usarse la mentira, la gente no debe seguir siendo engañada porque puede haber una ruptura de otras dimensiones”. https://n9.cl/tzkei
Meses ante de su fallecimiento, Muñoz Ledo se convirtió en la némesis de López Obrador. Lo tachó de no responder a un acto de valentía porque es un cobarde, de utilizar el miedo y estableció que “Andrés tendrá poder mientras nos agachemos. Es hora de Salvar a México”.
“La ley me vale (…) Es el lema del Kukuxklán, venganza con mano propia, venganza, hago justicia (…) Es el profundo desprecio por el Estado de derecho. Esto lleva a una transición a la forma de dictadura. Andrés Manuel revela una enfermedad, una debilidad, una patología mental que consiste en compensar con algo llamado realización simbólica. Es un hombre que suele temer a los de arriba y empuja a los de abajo”.
Y continuó: “no le gusta ser cobarde (a AMLO) pero no es valiente, entonces él reacciona envalentonado. ¿Cuál es su base?, es el temor de los demás”. Y agregó: “Nuestro amigo al que me refiero, que conozco bien, tiene terror de todo aquello que no controla”. https://n9.cl/i8lnq
En este contexto, López Obrador recibió a Elizabeth Sherwood asesora de seguridad de EU a quien, dijo, no pensaba recibir, pero si lo hizo. Al término de la reunión, la canciller Alicia Bárcena aseguró que se trató el tema del narco presidente y lo desdeñó por tratarse de un caso cancelado, pero luego el mismo presidente negó tal hecho al asegurar que no trataron el tema. https://n9.cl/0ftpx
Con independencia de lo que dijo la canciller, que a todas luces fue una estrategia fallida de Jesús Ramírez, López Obrador recibió a la funcionaria una vez que tenía control de la situación pues, como dice Muñoz Ledo, le aterra no tener el control, lectura que no entendió su coordinador de comunicación.
Esa fijación mental es la que doblegó a Marcelo Ebrard ya en dos ocasiones, la misma que impulsa reducir de 40 a 30% la vinculación en la revocación de mandato para disuadir a Claudia Sheinbaum de seguir sus órdenes allende el 2024, es la que quiere para imponerse a la SCJN así como de otros organismos independientes que aún se oponen a sus caprichos.
Ese control extremo es el que ha desangrado económicamente al país, el mismo que no enjuicia a todos aquellos que llama inmersos en corrupción –desde ex presidentes hasta organismos desaparecidos pues bajo una acusación legal les daría el derecho de defensa–, y que, si bien no mata o violenta físicamente, si lo hace con sus políticas fracasadas.
Bajo este contexto también se entiende su desprecio misógino. El enojo con sus hijos a quienes tiene que defender pero que se le salieron de control, su posición ante la SEDENA controlada inyectando la ambición a sus jefes y su empecinamiento con sus escasas obras sexenales despreciando el progreso para el resto del país.
Es comprensible el control férreo sobre el presupuesto, de las iniciativas enviadas sin cambiarle una coma, el continuo ataque contra medios informativos que le son adversos, el menoscabo constante contra sus opositores, el catálogo de enemigos fifís contra aquellos que no están con él –pues Slim y otros beneficiarios no lo son–, se entiende también bajo esta tesitura su menosprecio a los científicos, intelectuales y luchadores sociales, sobre todo ecologistas que van unos sesenta asesinados en su sexenio.
Y como dice Muñoz Ledo, suele temer a los de arriba, lo que nos lleva al doblamiento ante Trump, a cruzar los brazos ante los jefes de los carteles, a doblar las manos ante los magnates, a considerar y admirar a quienes considera presidentes super estrellas de otras naciones como Cuba, Nicaragua, Venezuela, Rusia, China…
Tenemos pues un presidente cobarde que en su egolatría utiliza el control como una herramienta para desdoblar su pequeñez humana interna.
EN FIN, POR HOY es todo, mañana le seguimos si Dios quiere.
Armando Vásquez Alegría es periodista con más de 35 años de experiencia en medios escritos y de internet, cuenta licenciatura en Administración de Empresas, Maestría en Competitividad Organizacional y Doctorado en Administración Pública. Es director de Editorial J. Castillo, S.A. de C.V. y de “CEO”, Consultoría Especializada en Organizaciones…
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